Volví a Perú, esta vez al norte y hoy les muestro cómo es quedarse en Ibis Trujillo, sin duda una alternativa óptima para viajeros que quieran conocer la ciudad.
Alojar en un hotel Ibis es garantía de buen servicio, sabes que te quedarás en hoteles modernos, de espacios pequeños pero muy bien aprovechados, ideales para quienes viajan por trabajo o que pasarán gran parte del día conociendo las ciudades, pero que quieren dormir cómodos y contar con todo lo necesario para descansar apropiadamente y con una insuperable relación precio/calidad.
En el caso de Ibis Trujillo la ubicación es óptima para recorrer, se encuentra a pocas cuadras caminando de la plaza de Armas, donde podrás disfrutar de hermosa arquitectura colonial y además se encuentra entre dos grandes avenidas Húsares de Junin y Larco, donde encontrarás variedad de restaurantes y otros servicios para disfrutar.

fachada y restaurant de Ibis Trujillo
A pesar de su ubicación central, desde las habitaciones no se oye ruido de las calles aledañas pues están muy bien aisladas.
La llegada a Ibis Trujillo
Llegué en taxi puesto que hay gran cantidad de ellos en la ciudad y no son para nada caros.
Al llegar el guardia tomó nuestra temperatura y nos ofreció desinfectante de manos, además tienen una alfombra sanitizadora de calzado en la entrada.
El check in fue rápido y eficiente, llenamos una declaración jurada de salud y nos anotamos en el horario en que queríamos bajar a tomar desayuno, esto pues por motivo de la pandemia es una de las medidas que han tomado para cumplir con los aforos y distancias de seguridad.
Las habitaciones de Ibis Trujillo:
La habitación era una habitación de 2 camas, los espacios son reducidos, sin embargo están muy bien aprovechados y cuentas incluso con un escritorio para teletrabajar con vista a la ciudad y muy buena señal de wifi. Si prefieres trabajar fuera de la habitación, en las áreas comunes encontrarás también escritorios acondicionados para ello.
Me gusta mucho que al ser un hotel moderno piensan en todo, como por ejemplo que tengas enchufes cerca de la cama para cargar tus electrónicos y de todos los tipos, por si olvidaste tu adaptador. Aquí tenías el de dos patas planas de Perú, el de dos patas redondas que se usa en Chile y también enchufes con entrada USB.

Habitación pequeña pero cómoda y muy luminosa
Cuentas también con un gran espejo de cuerpo entero cercano a la puerta que a mi juicio es algo que muchos hoteles olvidan y es importante tener.
Encontrarás también un gran televisor de pantalla plana con señal de cable, caja de seguridad para tus pertenencias, un closet y en una bolsa sellada sanitizada encontrarás todos los amenities y toallas de baño, sanitizados.
El baño cuenta con secador de pelo y una ducha que cae en forma de lluvia, perfecta para quitarte el cansancio del día y caer en la cama para un descanso reponedor.

Escritorios en las áreas comunes perfectos para teletrabajar
Conociendo el restaurant y el bar:
A un costado de la recepción encontrarás el bar de Ibis Trujillo, con una carta que cuenta con lo necesario para un momento de distracción en los sillones del Lounge: desde cervezas nacionales e importadas, hasta los tradicionales pisco sour y chilcanos, infaltables si estás en tierras peruanas.

El bar y su estética, muy moderno
Por la mañana el desayuno se sirve en el restaurant, bajas en el horario que indicaste previamente al hacer tu check in y consiste en un buffet asistido: personal del restaurant va armando la bandeja por tí de acuerdo a lo que vayas seleccionando del buffet.

Buffet asistido en Ibis Trujillo
Encontrarás alternativas de frutas, jugos naturales, pastelería, opciones calientes como tequeños y frijoles y otros y también variedad de panes, jamón, queso y mermeladas.
Además de esto puedes pedir que te preparen huevos a tu gusto, yo decanté por ricos omelettes y por supuesto el infaltable café de la mañana para terminar de despertar antes de salir a recorrer.
El restaurant ofrece además opciones de menú ejecutivo desde 25 soles, también una variada carta con tapas, hamburguesas y platos tradicionales peruanos.

Lounge muy cómodo para disfrutar del bar
Los días lunes ofrecen el Shambar, que es un plato tradicional de la zona que consiste en una sopa de menestras con cerdo que sólo se prepara ese día de la semana.
Del restaurant probé las tapas de lomo saltado en pan pita y eran un verdadero poema, la sazón de la salsa con que acompañas las tapas se me hace difícil de olvidar.

Hay gran dedicación detrás de la preparación de platos y tragos
El servicio en Ibis Trujillo:
Esto es algo común en todas las zonas de Perú que conozco: el servicio es amable y muy eficiente. Tanto en la recepción, como en el restaurant, están atentos a resolver todos los requerimientos que puedas tener.
En mi caso solicité servicio de despertador, porque me tenía nerviosa que a mi móvil se le cambiara la hora de forma automática y también me coordinaron un taxi que necesitaba para ir a tomarme el PCR a un lugar donde sólo atendían al auto.
Todo funcionó como reloj suizo. Respecto al servicio de habitaciones, tú decides si quieres que entren o no a hacerte el cuarto, puesto que debido a la pandemia hay personas que se sienten más cómodas si nadie más entra a su cuarto.
En mi caso sí lo solicité y todo perfecto, se rigen por estrictos protocolos de la cadena de hoteles ACCOR para la sanitización de los espacios, así que me sentí segura todo el tiempo.
Si viajas con tus mascotas hay otra buena noticia, el hotel es pet friendly, por lo que serán muy bien recibidos.
Los valores de las habitaciones van desde los $32.000 clp en habitación doble por noche (aproximado al cambio) que la verdad me parece un precio increíble para la calidad y comodidad que ofrecen.
Sin duda Ibis Trujillo es un hotel al que volvería y que recomiendo: la ubicación, el servicio, la comodidad y el precio son perfectos para conocer esta ciudad del norte de Perú, para más información sobre servicios y reservas ingresa aquí.