En mi último viaje a México, una de mis metas era la experiencia en globo sobre Teotihuacán, para admirar la zona arqueológica desde las alturas y subirme a un globo por primera vez.
Opciones había un montón, coticé varias y los precios en todas las agencias eran bastante similares. Me decidí por Volare porque vi buenos comentarios y me gustó el servicio que me ofrecieron desde el primer contacto, tenía muchas dudas y me resolvieron todas con rapidez y amabilidad.
Contraté la experiencia en globo compartido con transporte redondo desde Ciudad de México. El transporte a diferencia de otras agencias era desde el hotel, no en un punto de encuentro. Esto me pareció infinitamente más cómodo, sobretodo porque el traslado empieza a las 5:45 AM.
El traslado demoró alrededor de 1 hora, venía profundamente dormida, de pronto abrí los ojos y el paisaje era de película, un globo de muchos colores y arriba un increíble arcoiris (van a tener que creerme porque no alcancé a sacar la foto jajaja)
All llegar pasamos por registro y podíamos tomar café para despertar. En pocos minutos el globo estaba listo y subimos a él. Nuestro piloto fue Paco de la Rosa, quien anunció que tendríamos un vuelo suave.

Los nopales y el globo, una imagen muy mexicana
El canasto del globo compartido es bastante cómodo, con 4 compartimentos para 2 personas más el piloto en medio. Él va avisando a cuantos pies vamos subiendo. Las vistas son increíbles, el amanecer, los otros globos de fondo y las pirámides de la zona arqueológica constituyen un escenario impresionante para esta actividad.

La impresionante pirámide del Sol desde las alturas
Tenía miedo de pasarlo mal porque sufro mucho en los aviones con las turbulencias, pero el globo nunca hizo ningún movimiento brusco y aún cuando les temo a las turbulencias no sufro de vértigo, por lo que disfruté en todo momento sin ponerme nerviosa.

Disfruté la experiencia a concho, hasta para selfies con las pirámides tuve ánimo
Tenía mis aprensiones también respecto al descenso, mucho me habían comentado que era muy difícil de controlar y me lo imaginaba más movido.
Paco se mantuvo todo el tiempo en contacto con los asistentes en tierra a quienes les informaba las coordenadas donde estábamos para asistir el descenso, en la parte final hubo más viento del esperado y necesitamos asistencia desde tierra, a través de una cuerda con la que se atrajo el globo hacia ella.

Un poquito de asistencia desde tierra para descender
El canasto jamás perdió estabilidad y aún con eso el descenso fue suave. Incluso divertido cuando pasamos por el fundo de un señor que al parecer cazaba aves y nos miraba escopeta en mano, menos mal no era un cazador de globos.

¡no dispare! sólo somos viajeros xD
Terminada la experiencia nos llevaron de vuelta al globopuerto donde Paco recitó una oración de agradecimiento, desayunamos, brindamos con espumante y se nos entregaron los certificados de nuestra vuelo.

Brindo por más amaneceres como este
Otra cosa que me habían comentado cercanos que habían volado en globo en otros lugares, era que el olor a gas era insoportable y que se te impregnaba en la ropa, puedo decirles que nunca lo sentí en lo más mínimo.
Lee aquí los mitos y realidades sobre los vuelos en globo
Sin duda recomiendo el vuelo en globo sobre Teotihuacán y la experiencia con Volare fue óptima, cabe señalar que no recibí ningún pago por esta reseña y que se trata absolutamente de mi experiencia personal, así que si lo están pensando atrévanse! les prometo que no se arrepentirán!